Atrapado.

Así me siento al no poder entrenar. Tras la carrera de montaña de El Burgo de Osma dos ampollas en los pies se convirtieron en heridas y ahora mismo es imposible salir a correr o montar en bici sin dolor.

En un primer momento intente probar a ver que tal iba, pero al tener el sábado el Cross Rector de la universidad prefiero no forzar, curar bien las heridas y estar listo para la carrera.

Por otro lado comentar lo contento que acabé dicha carrera de montaña. Me parece una disciplina espectacular a la par que exigente y creo sin ninguna duda que en un futuro mis esfuerzos deportivos  tendrán como objetivo carreras de montaña de estilo Ultra Trail (mucho mas largas, de entre 80 y 160 km) pero eso queda para un futuro, que todavía soy joven y no puedo quemar las piernas gratuitamente.

Decir también que el estado de forma con el que me encontré fue excelente y pude acabar la carrera en tercera posición a pesar de las heridas.

Ahora toca esperar y volver a poner el motor en marcha en cuanto desaparezca el dolor, veremos si es mañana o pasado. Pero hay que tomárselo con calma, no vaya a ser que compliquemos una situación bastante simple.

Un saludo.

Durante la carrera de montaña.